martes, 1 de marzo de 2011

COMPRENDER

No puedo parar de pensar en la maravillosa sensación de poder compartir contigo un sencillo desayuno a mitad de mañana en mi día de trabajo. Algo tan normal y tan corriente para todo el mundo, es un regalo para mí porque casi nunca lo tengo.

Darse cuenta de lo valioso que es este tipo de acciones, de hechos y de momentos es lo que da sentido al día a día. Respirar profundo y soltar el aire que te llena los pulmones como alivio a la presión que se siente dentro.

Una tarde de domingo muy diferente a todas las tarde de domingo que llenan mi año. Una película compartida con la mejor compañía que se puede tener y un broche de oro a un fin de semana inesperado y valioso.

Pasear de madrugada por un Madrid con temperatura de primavera y comprender que no hay nada mejor en el mundo como estar al lado tuyo.

Gracias por cada regalo que me haces estando a mi lado.

Te quiero mucho.

martes, 15 de febrero de 2011

DE PENA

Cuando tendríamos que ir avanzando hacia delante lo que hacemos es dar pasos hacia atrás. Nos movemos en una cortina de humo que nos quiere mostrar una sociedad avanzada, plural, tolerante, en la que todos somos iguales y bla bla bla. Todo mentira, como diría la canción. La realidad es bien diferente, y los extremismos siguen ahí, incluso más acentuados si cabe. Sólo se encuentra la paz, la tranquilidad y la libertad en ciertas zonas de ciertas ciudades, todo muy limitado.

Pero ahí tenemos un partido político de cuyo nombre no quiero acordarme, financiando cadenas de televisión donde se dan mensajes racistas, homófobos, machistas, radicales, sucios etc, y no pasa nada, absolutamente nada. Tenemos libertad de expresión, y la utilizamos para lanzar mensajes en contra de la libertad de cualquier persona para hacer con su vida lo que le de la real gana. Libertad de expresión para limitar la libertad de quien no es como yo quiero que sea.

¿Lo peor? Que a ese partido político se le vota. Que dentro de poco tiempo gobernará este país, que tendremos a esos mismos homófobos quitándonos derechos que ya hemos adquirido, lanzando mensajes con mayor libertad, si cabe, de la que lo hacen ahora, y tendremos que callar, tendremos que tragar, tendremos que seguir hacia una meta que cada día, personalmente, veo más lejana.

No sé realmente si la gente sabe a quien vota o es que piensan como ellos. No sé que es peor, si una cosa o la otra. Sólo tengo claro, muy claro, que hay idologías que por mucho tiempo que pase no van a cambiar ni tan si quiera un poquito. Una lástima pero es la realidad.

Intentaremos seguir luchando...

OPORTUNIDADES

Tengo muchas veces la sensación de equivocarme una y otra vez con las personas. No con todas, menos mal, pero si con algunas. Y aunque muchas veces tengo la certeza de que eso es así, vuelvo a dar oportunidades a quien quizá no debería darsela.

Puede parecer una tontería pero es algo que ocupa mi pensamiento algunas veces. El hecho de cerrar las oportunidades, de aprender, de tomar toda la experiencia reunida para actuar y para poner una barrera que no deje que nada del exterior perturbe lo que tengo en el interior.

Y es que hay personas que, aunque me resulte sorprendente aceptarlo, desean que las cosas vayan mal. Y lo desean por envidia, y lo desean por posesión, y lo desean con ansia. Con tanta ansia que mucha veces se les ve demasiado, tanto que me cuesta aceptar que la gente pueda llegar a ser así.

Sinceridad, honestidad, claridad de sentimientos, generosidad,apoyo a lo que se quiere sin querer poseerlo son definiciones que no encajan en el día a día de estas personas que lo único que quieren es lo que anhelan sin importarles el cómo, el cuando, el donde ni a quien se tienen que llevar por delante.

Alimentar los embrollos, echar suciedad, toda la que se pueda y más, intoxicar sin miramientos y dejar atrás todo atisbo de ideal de amistad. Una pena, una verdadera pena que me golpea en la cara cuando me meto de lleno en otro intento de conceder oportunidades.

Y las concedo porque casi siempre dejo a un lado mis propios sentimientos para dar cabida a los de los demás aún cuando no se lo merezcan. Y aunque nadie es nadie para decir quien se merece que, me despido diciendo que las personas egoistas y envidiosas, que mal meten y son una simple fachada de cara al exterior con un interior totalmente diferente, no se merecen nada.

Me aplico la lección y para la próxima espero no haberla olvidado o por lo menos, saber ponerla en práctica.

SAN VALENTIN

Echamos el cierre ya, con un tinte y un aura de "envidia sana", a este 14 de Febrero día de los enamorados. Envidia sana porque muchísimas parejas habrán tenido en esta noche que ya se acaba, una cena especial, de esas románticas, de esas que ablandan el carácter y amplían la ternura.

En estos casos suelo utilizar la imaginación, esa que me lleva a sitios y a momentos que me es imposible alcanzar fisicamente en el momento en el que los deseo.

Por eso imagino esta noche, esa cena romántica al lado de unas velas, a tu lado, cerquita tuya, con un buen vino acompañándonos, con tu mirada iluminada, tu sonrisa pícara y nuestros besos.

Me voy a la cama con esta imagen en mi cabeza y con la seguridad de que vamos a tener esa cena de 14 de Febrero en cualquier noche en la que estemos juntas.

Te quiero mucho. Tuya.

jueves, 20 de enero de 2011

Ganas

Con ganas de verte y con ganas de sentirte. Con muchas ganas de poder mirarte a los ojos y reecontrarme con tu mirada, esa que brilla y que sonríe, que me fulmina por completo y me hace estar a tus pies.

Con ganas de tu conversación que me hipnotiza y me hace sentirme la mujer más orgullosa del mundo. Te necesito, lo sabes. Hace tiempo que no te tengo, más de lo que querría, más de lo puedo ya aguantar. Ganas de ti y de tu compañía, ganas de tu olor.

Me haces falta, te lo digo a cada momento. Mucha falta, más de la que te puedas llegar a imaginar, y por eso espero con impaciencia el momento de volver a tenerte en frente de mí.

Queda poco y lo sé, pero lo poco se me hace eterno cuando te estoy esperando. Te espero con muchas ganas, con mucho amor, con mucho deseo.

miércoles, 5 de enero de 2011

AÑO NUEVO

No hay mejor manera que despedir el año al lado de la persona que se quiere. Al igual que, no hay mejor manera que recibir al año nuevo que brindando con la persona que amas. Siempre que eso es posible, es difícil no pasarlo bien, y más que difícil yo diría que es imposible.

Cuando con esfuerzo vuelvo a abrir los ojos y pienso que estoy ya en un año nuevo, pienso inconscientemente que algo diferente ocurrirá en cualquier momento. Que todos vamos a ser buenas personas, que la vida es maravillosa la mires por donde la mires, que no hay problemas que resolver, que no hay obstáculos que salvar, que todo huele bien y sabe bien y llega al alma.

Pero a los pocos segundos de volver a la realidad y de poner los pensamientos en orden, te das cuenta de que el uno de Enero es un día más, que con todo lo que nos despertamos el 31 nos volvemos a despertar el 1. Que te tengo al lado pero sólo durante cierto tiempo y que en apenas un día y medio volveré a estar en el mismo lugar en el que me encuentro pero sin tí.

Son ilusiones y deseos que se originan por dejarse llevar por el aura de la navidad, sin darme cuenta que ese mismo aura me dará un bofetón en la cara en muy pocas horas. Pero, así soy yo, incansable creadora de ilusiones y deseos que no se rinde por muchas tortas y vueltas a la tierra que pueda tener.

Y como no hay nada mejor que despedir el año con la persona que quieres, y como no hay nada mejor que brindar por el año nuevo con la persona a la que amas, no me queda más que sonreír porque yo he sido afortunada de poder hacerlo. Y aunque el año nuevo no trae de repente y por arte de magia la solución a los problemas, me propongo seguir búcandola aún con más fuerza que el año anterior.

Y como no hay nada más bonito en esta vida que despertarme y encontrarte a mi lado, me siento la mujer más feliz del mundo por poder mirarte a los ojos y verte sonreir.

Feliz año nuevo, felices ilusiones nuevas.

sábado, 11 de diciembre de 2010

CAMINAR

Querer llegar y no poder. Intentar comprender y no hayar la forma para hacerlo. Escalar y escalar, intentarlo siempre aunque tenga la sensación de que pocas veces llego a la cima. Sin descanso pero con aliento, sin parada pero cogiendo fuerzas por el camino. Comprender lo desconocido es difícil, ponerse en situación sin saber que situación es, lo es aún más. Pero sigo, no paro, no paro.

A veces me veo lejos y a mucha distancia, con un largo camino por recorrer que arde bajos mis pies. Sonrío cuando avanzo y entristezco cuando me veo en el mismo sitio que ayer. Busco soluciones para ir más rápido y muchas veces deduzco que no sólo depende de mí. Pero mi parte intento cubrirla aunque muchas veces no lo consiga. Lo seguiré intentando siempre. Acertar con los comportamientos en cada situación es lo más complicado, no sólo para mí, para todo el mundo. Y en ello estaba, estoy y estaré. Espero conseguirlo algún día.